viernes, 17 de noviembre de 2017

#mamádeprematuro

Hoy se celebra el Día Internacional del Bebé Prematuro para rendir homenaje a estos pequeños guerreros luchadores. Soy mamá de dos niños que nacieron prematuros, cada uno con situaciones vividas distintas pero con desenlaces maravillosos.


Entre 1-2 de cada 10 nacimientos son de bebés prematuros y es un problema serio de salud pública. Mas de un millón de bebés prematuros mueren anualmente a nivel mundial y los que sobreviven pueden tener problemas de salud o algún grado de discapacidad.



Creo que nadie sabe lo que pasan los padres de un bebé prematuro hasta que lo tienen, obviamente. Antes de tener 2 bebés prematuros en diferente tiempo, pensaba que comprendía a los padres. Cuando mi segundo hijo nació 6 semanas antes y estuvo en cuidados intensivos y delicado, empecé a comprender que se siente una impotencia indescriptible, se siente querer hacer algo y no poder, se quiere mantener la calma y muchas veces no es posible.  Tanto fue el estrés vivido que tengo lagunas mentales de ciertas situaciones, no me acuerdo de largas horas, pero se que pasaron porque me las cuentan. Comprendí que a pesar que los médicos le hablen a los padres, muchas veces la cabeza está en otro lugar y hay que volver a repetir la información. 



Nadie quiere tener a un hijo delicado de salud y pensar todo lo malo que puede pasar o que el desenlace puede ser fatal, nadie. A veces solo necesitamos compañía, en otras ocasiones espacio o  silencio. Cargar por primera vez a tu bebé cuando nace prematuro te llena de ánimo, ojalá que en mi país los padres estuviesen más involucrados en las unidades neonatales, pero no porque ellos no quieran estar, si no porque los "sistemas de salud" no están diseñados para ello, cambiarlos lleva tiempo, pero vale la pena el esfuerzo.  Como dice un gran colega: los padres no deben ser visitas, deben ser parte del tratamiento.  Estoy tan de acuerdo, sigo haciendo el intento, sigo tratando que las abuelas se cuelen en las unidades para ver a sus nietos, sigo luchando para que los padres hagan método canguro el mayor tiempo posible, trato que los carguen y los acaricien aunque estén llenos de tubos, pero tristemente no hay tanta ayuda como quisiera, pero por suerte siempre encuentro cómplices que me ayudan.



Si nos ha costado lograr que los bebés recién nacidos a término estén 24 horas con sus padres desde el momento de nacimiento  se podrán imaginar lo que es tratar lo mismo en las unidades de cuidados intensivos neonatales, pero la esperanza no la perdemos muchos de los que trabajamos en el área y andamos en el mismo "movimiento".



Tener un bebé prematuro no solo impacta a una familia en el momento que nace, si no que impacta gran parte de la vida del niño y de la familia completa. Si contamos las terapias, las citas médicas, la atención integral en varios aspectos de la vida del niño, es un proceso largo a veces. No solo los niños son pequeños grandes guerreros y luchadores, los padres también lo sean y todos aquellos que apoyan en la familia y los amigos.



Mis hijos prematuros me han enseñado más de lo que yo misma pensaba, seguiré pensando que a pesar de todo lo vivido ene los momentos críticos y las consecuencias de haber nacido prematuros me han ayudado infinitamente como persona, no siempre tenemos el control de las cosas y aunque ya tengan 4 y 8 años siempre seré #mamádeprematuro, nacen pequeños pero viven en grande.



GN

lunes, 6 de noviembre de 2017

Humanizado, respetado

Desde que tengo memoria mi mamá y mi papá me decían hasta el cansancio que todas las personas del mundo se respetaban, al igual que la naturaleza y  los animales. Que a todos debíamos tratar por igual y que ninguna persona merecía ser tratada mal ni con palabras ni con acciones.

En los últimos años siento que está en boca de muchos la palabra "respetuoso" o "respetado"y  "humanizado". Estos participios se lo quieren colocar a muchas acciones en el ámbito de la salud en todos sus niveles. Que si el parto humanizado o respetado, la lactancia respetada, la cesárea respetada, el apego respetado, el destete respetado y en estos días vi un post de la terapia ocupacional respetada. Estas palabras en algunos casos bien utilizada hacen referencia, por ejemplo en un parto, a una "modalidad" de atención que se caracteriza por el respeto a los derechos de los padres, de los niños y de la familia al momento del nacimiento y que todo se desarrolle de la manera mas natural posible. Así mismo aplicaría para cualquier atención médica o de cualquier servicio de salud.

Aclaro que no estoy en contra con nada de eso, lo que me molesta es que si no ponemos este participio en la atención que uno brinda hay que asumir que uno no lo hace bien y eso sí me molesta. Si todos merecemos respeto y tenemos derecho a ser tratados por igual ¿por qué hay que estar poniendo  o agregando palabras para que se escuche mejor o para que se piense que así es como hay que hacer las cosas?. Si todos los profesionales en la atención de salud, pusiéramos de nuestra parte, estas palabras se omitirían.

Una vez un colega pediatra me dijo: es que yo atiendo bebés en partos humanizados y favorezco a la lactancia respetuosa. La verdad no quise preguntar qué tan diferente era a lo que muchos hacemos pero no quería entrar en discusión. No me cabe en la cabeza que si yo le doy pecho a mi bebé de la manera que piense que es la mejor pueda estar haciendo algo irrespetuoso o si no pude dar mas de tres meses de lactancia materna o le ofrecí a mi bebé lactancia mixta entonces resulta que estoy irrespetado a mi bebé. No logro entender muy bien, qué lástima que haya que recalcar esas palabras para pensar que las cosas se hacen bien y que los demás no lo hacen bien.

Cada profesional debe hacerlo de la mejor manera posible y con buen trato a todo el mundo. Hoy comentaba que hay meseros que atienden buenísimo y otros que ni una sonrisa esbozan, ¿entonces habría que decir que son meseros con atención humanizada? en todas las profesiones hay personas que hacen su trabajo al 100% y otras pues que lastimosamente no, todo viene desde el hogar, desde que estamos pequeños, desde la educación que nos brindan nuestros padres y que nos corroboran en las escuelas, la educación es la clave del éxito para todo. Entonces parece que hay que aprender a atender humanizadamente y respetuosamente, triste. Aclaro que esta es mi opinión y es muy personal, no involucro a ningún otro personal de salud. El que da cariño recibe cariño y con el respeto debería ser lo mismo.

Saludos, 

GN