jueves, 19 de marzo de 2015

¡Pienso en eso y me pica!

Empezó la escuela y se perpetuan los molestos animalitos que causan excesiva picazón de solo pensarlo, ¡los benditos piojos! Podría decir que es sinónimo el empezar la escuela y atender llamadas de niños con piojos, mamás que no saben qué hacer o supuestas alergias en la cabeza que hacen que el niño no se pare de rascar,  incluso en mi casa ha ocurrido.

Los piojos son  parásitos muy comunes que se adhieren en la raíz del cabello y se alimentan de restos cutáneos, secreciones sebáceas o sangre. Se pueden adherir a la raíz del cabello limpio o sucio, pero mientras más limpio esté el cabello menos secreciones y células muertas existen, así que menos "se puede alimentar el piojo". Una amiga dice que no importa si el pelo es bueno o malo los animalitos odiosos igual se pegan en las cabezas. Lo que sí está claro es que mientras menos cabello expuesto haya menos área hay para que se contamine el pelo, o sea que si las niñas tienen cabello largo y lo llevan recogido menos area de exposición habrá.

Sinceramente yo aprendí cómo se veía una liendra (los huevos del piojo) cuando mi hijo tenía 2 años y en la escuela revisaron las cabeza y ¡tarán! el hijo de la Pediatra tenía piojos, bueno...hasta en las mejores familias pasa. Los piojitos eran hasta rubios, tenían un color amarillento del color del cabello de mi hijo. Lo que decidí en ese momento fue rapear al pobre niño y la criatura lloraba diciendo que nunca más le iba a crecer el pelo. Desde esa ocasión es casi ley en mi casa que se revisen las cabezas una vez a la semana y ante cualquier piquiña vamos hurgando cabello  para ver si están los indeaseables habitantes.

Es raro la familia en la cual no ha existido "epidemia", a veces hasta las mamás se infectan. Lo ideal es dar tratamiento a todos los miembros que habitan en la vivienda. La principal localización es la parte trasera de la cabeza por donde está la nuca y detrás de las orejas. Las liendras miden menos de un milímetro, o sea que para que algunos papás las puedan localizar necesitan anteojos o lupa  por la presbicie. Los piojos miden aproximadamente 2 milímetros y es leyenda urbana que saltan de cabeza a cabeza, se pegan por contacto, por abrazos, por peines, almohadas o artículos personales infectados. Por eso es que hay que lavar con agua caliente todos los artículos cuando detectamos estos visitantes , porque pueden vivir hasta dos días fuera del cabello.

Yo no me acuerdo que a mi hermana o yo hayamos tenido piojos cuando éramos niñas. O mi mamá nunca se enteró o pasamos agachadas. Ahora cada vez que empieza la escuela o durante el año escolar mi casa tiene los odiosos visitantes. En el salón de uno de mis hijos siempre era la misma niña el foco de infección. Ojalá que este año no sea así.

Los remedios caseros son innumerales, algunos sirven y otros no. Por ahí me contaron que hasta querosene le pusieron en la cabeza para matar el ejército de piojos que tenía en la cabeza, lo más probable es que se hayan muerto todos, pero los riesgos de toxicidad son altos. Si enumerara todo lo que he escuchado en cuanto a remedios caseros, podría hacer otro escrito. También hay remedios médicos, shampoo y lociones para colocar en la cabeza. Algunos repelentes de insectos también repelen piojos. Lo importantes es que si no se puede tener la paciencia para quitar liendra por liendra de la cabeza y cepillar con los peines especiales las cabezas, mejor consulte a su médico para que le dé recomendaciones. Si encontramos piojos y los retiramos, a la semana se debe volver a revisar porque en 5-7 dias nacen los que eran huevos.

Acabo escribiendo rascandome la cabeza, solo de pensar en ellos me pica como a muchos. Mejor que me revisen.

GN

1 comentario:

  1. Excelente Geraldine. Los piojos, contrario a la creencia popular, no saltan de cabeza en cabeza, se pasan de una cabeza a la otra por contiguidad. Por eso, entre los niños que juegan juntos es más fácil la transmisión. El tratamiento menos nocivo: sacarlos uno a uno. Felicitaciones otra vez

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