viernes, 23 de junio de 2017

Seguiré tratando...



Estoy sumamente enojada, estamos en una sociedad en que muchas personas catalogan a otras con características erradas. ¿A qué me refiero? en este caso específico los catalogados son los Pediatras y muchas mamás.

Hago constar que ésta es solo mi forma de pensar y no la de mis colegas, pero muchos nos vemos involucrados en comentarios dañinos, mal intencionados y lo peor, que es lo que más me molesta, muchas veces los comentarios vienen de parte de muchos colegas. Asumo que todas las profesiones pasará lo mismo, aunque no me conste.

Hay gran cantidad de colegas que tratamos de actualizarnos lo más que se puede, pero es obvio que nos guste más ciertos temas que otros. Los que me apasionan son apego temprano, la alimentación del niño en el primer año de vida, trastornos de integración sensorial, desarrollo del niño, prematuros tardíos y sus complicaciones a largo plazo y lactancia materna. Todos tienen una razón de ser y hay causas particulares de mi pasión por ellos, ya que como mamá he pasado por tantas vivencias con mis tres hijos que me han interesado esos temas por circunstancias varias.

Cuando los estudios de investigación y las revisiones de los mismos indican que ciertas terapias son mejores que otras, lo más probable es que lo vayamos a recomendar a los pacientes, pero cada caso es único y particular. Puede ser que cierta forma de tratamiento le sirva más a un paciente que el otro y se tenga que ajustar la intervención o el tratamiento.

Uno de los temas más controversiales siempre será la lactancia materna, lo cual en contra de lo que yo pensaba que es algo tan natural y lo único que se le debe ofrecer al bebé durante los 6 primeros meses de vida y luego continuarla junto con la alimentación complementaria, resulta ser que es un tema que lo han hecho tan complicado que no se lo merece. Siempre será lo mejor para el niño y la madre eso lo sabemos, pero vuelvo a repetir que cada caso es individual y diferente. Lo que no puedo permitir es que si una madre decide no dar pecho exclusivo a su bebé por alguna razón que ella tenga, las demás personas la cataloguen como la peor madre hasta el punto de hacerla sentir del tamaño de una hormiga. Hay madres, y muchas, que hacen hasta lo imposible por dar pecho exclusivo y a pesar de ciertas dificultades lo logran, pero no todas son iguales. Hay otras que por circunstancias de la vida, enfermedades, relaciones familiares y otra gran cantidad de cosas no lo logran hacer como ellas querían y otras simplemente deciden que no van a dar pecho del todo. Mi pregunta es ¿Por qué juzgarlas? cada quién es libre de hacer lo que quiera y decidir lo que es mejor para su hijo siempre y cuando no se ponga en riesgo la vida del niño, de la madre y de los que vivimos alrededor.

Así mismo como catalogan a estas madres por las decisiones que toman, también etiquetan a los Pediatras que somos anti lactancia, anti apego temprano, anti muchas cosas. Lo peor es que generalizan sin saber las circunstancias de cada caso, de cada madre, de cada Pediatra. ¿Por qué mi enojo? porque pueden desbaratar a alguien, llámese madre, abuela o pediatra, con comentarios sin sentido y sin razón de ser, que muchas veces los hacen sin ser malintencionados y otras con  mal intención y alevosía. Siempre trato de no enojarme, pero hay veces que no lo logro, que "me hierve la sangre" pero bueno, yo seguiré tratando como digo siempre de ser pro lactancia materna, pro apego temprano, pro vacunas y muchos pro que hagan que los niños sean más sanos y felices.

GN

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