viernes, 21 de julio de 2017

Pensamientos varios

Todos los padres criamos a nuestros hijos como mejor  pensemos que es la forma correcta. Puede que lo que haga otro padre con su hijo no nos parezca lo ideal pero tendrán sus razones de hacerlo y sus razones de crianza por lo que debemos respetar a todos. A pesar de ser diferentes, tenemos varias cosas en común en cuanto a actos que hacemos o conductas que se repiten en muchos hogares.
Por ejemplo, ¿cuántos de nosotros nos hemos quedando viendo a nuestros hijos cuando duermen? Sobre todo cuando están mas pequeños. Me encantaba mirarlos porque me transmitían paz, sentía que estaban a salvo de todo y la ternura era notoria. También me pasaba que cuando estaban bebés y me quedaba mirándolos, si hacían algún movimiento me escondía para que no me vieran si se despertaban porque a veces no era tan fácil dormirlos y la paz se podía convertir en caos.

Otra de las que muchos hacemos es decir mentiras, triste pero cierto y el que nunca lo haya hecho merece mas que mis respetos. Cuántos no hemos dicho cuando algún hijo quiere que le compremos algo y le explicamos que no lo vamos a comprar y siguen insistiendo, que el juguete o el chocolate no lo venden en ese momento, o cuando insisten en ir a algún lugar a pesar de explicarles por qué no vamos a ir terminamos diciendo que el lugar está cerrado. Muy mal, pero lo hacemos.
¿Cuántos no nos hemos ido a hurtadillas de la casa para que algún hijo no se de cuenta y no pasar por el llanto y la ansiedad de separación?
Otra clásica es escuchar mas de 100 veces la palabra "mamá" en un día y por unos segundos desear que no lo digan más por unos minutos, y pensar que cuando tenían meses queríamos que dijeran mamá rápido. ¡Qué ironía! Pero indudablemte me encanta ser la mamá de ellos y cuando no los veo por algunos días y llego a casa la palabra "mamá" arruya mis oídos y hace que mi corazón palpite más rápido.

Esta profesión de ser padres es una etapa, lo que hay que buscar es un balance, una crianza con respeto para que seamos respetados y aprendan a respetar a los demás. Todas las etapas tienen lo suyo, ya sea lo bueno y lo feo, pero si no aprendemos a ver lo bueno en cada cosa que hacemos se nos va a pasar más rápido de lo que queremos y no lo vamos a disfrutar. Seamos felices, hoy es uno de esos días de pensamientos varios en la profesión de ser padres...

GN


No hay comentarios:

Publicar un comentario